Las intensas precipitaciones en la región complican el pleno desarrollo de la cosecha gruesa.
Como bien auguraban algunos analistas el fin y el comienzo de año nuevo deparaba para nuestra región intensas precipitaciones.
Inicialmente ese pronóstico resultaba alentador para los productores que veían como la prologada sequía azotaba sus cultivos.
Seguramente nadie imaginaba que transitando los primeros días del año la geografía agropecuaria del departamento diera un giro de ciento ochenta grado.
En los últimos meses, la región recibió más de 400 milímetros.
Ello rápidamente cambio de eje la discusión, el problema ahora era el agua.
Con ello, se sucedieron esta semana conflictos entre productores, y de estos con mandatarios locales y representantes provinciales.
Los productores acusan a quienes tienen la responsabilidad política de no haber impulsado obras que anticiparan esta situación.
No obstante, tras sobrevolar las zonas afectadas se registró en el mayor de los casos que los propios “hombres” de campo ejecutaron a la perfección canales clandestinos con el único propósito de que el agua no ingresará a sus tierras.
Aquellas reuniones mancomunadas y solidarias tras el conflicto por las retenciones al grano que la Mesa de Enlace mantuvieron con el ejecutivo Nacional, parece a la fecha mostrar precisamente la contracara.
Cada uno busca su provecho personal, sólo con citar los casos en las localidades de Del Campillo y Melo son suficientes como para graficar este panorama.
Seguramente quienes incurrieron en este ilícito no conocen otro camino más que el de buscar cualquier micrófono y acusar a los mandatarios de turno tildándolos de asumir un rol pasivo frente a ello.
Por otro lado, es cierto también que el agua caída en este último tiempo deja estéril cualquier tipo de obra, frente a ello desde la provincia se debe asistir de manera inmediata a los productores afectados.
En lo inmediato, se debe aguardar que las lluvias cesen y el nivel del agua comience a bajar. Con ello se podrá planificar una cosecha gruesa que a priori ofrecerá rendimientos más que óptimos.
No obstante, hoy la producción se encuentra en jaque por la propia impericia de quienes trabajan las tierras, y por el factor que siempre tiene en vilo a los productores agropecuarios: el clima.
Fuente: Mariano Lopez, director de Citadirecta.com.ar
Fotos: Portal HRTV Noticias
